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La Desaparición de las Tarifas de Itinerancia, un Avance Importante para todos, pero ¿qué ocurre con los Operadores? Featured

La Desaparición de las Tarifas de Itinerancia, un Avance Importante para todos, pero ¿qué ocurre con los Operadores? Image Credit: European Parliament

La decisión de la Unión Europea sobre las tarifas de itinerancia, seguramente la apoyarían con entusiasmo millones de suscriptores de teléfonos móviles, especialmente aquellos que viajan con frecuencia por Europa. A partir de 2017, los usuarios de móviles de los 28 países miembros de la UE verán como desaparece el recargo en su contrato con el operador local por los minutos de voz, de los SMS y de los datos de los que hacen uso cuando están fuera de su país, lo que reduce significativamente los gastos por los servicios móviles en el extranjero.

Sin embargo, los responsables de los operadores no la han recibido con el mismo entusiasmo. La sentencia, aunque supone acabar con la serie de sucesivas regulaciones mediante las que se reducían las tarifas por itinerancia en toda la región desde 2007, augura tiempos difíciles para toda la industria. Esto permite evidenciar la homogeneización de servicios en el sector de las telecomunicaciones, y obliga a los operadores móviles a pensar que, la tremenda presión sobre los precios y el hecho de que la diferenciación de productos (aunque la diferenciación a la que nos referimos aquí es a la disponibilidad extra de servicios de voz, SMS y datos) no permite obtener los rendimientos esperados, puede que una adecuada monetización constituya, después de todo, una remota posibilidad. 

En lo que la industria se centrará en el corto plazo, sin embargo, es en las consecuencias de la sentencia sobre el precio total de los servicios móviles, y concretamente el de los datos.  Si los operadores móviles sólo pueden cobrar a los clientes por itinerancia en el extranjero los precios que aplican en sus países, tal vez aumentando las tarifas locales sea más fácil para ellos recuperar los costes que supone aplicar los acuerdos sobre itinerancia y proporcionar los servicios de itinerancia continua a sus suscriptores. Si esto sucede, una gran cantidad de suscriptores deberá soportar la socialización de costes de los hábitos de una pequeña fracción de aquellos que pueden permitirse el lujo de viajar con frecuencia, y consumen una buena cantidad de recursos de voz y datos en el extranjero.

Por otra parte, si los suscriptores viajan de un país donde las tarifas de datos son inherentemente bajas, a países en las que las tarifas de datos son mucho más altas, ya sea debido a mecanismos locales de fijación de precios, tipos de cambio (no aplicable en la UE) o estructuras de costes, estarán pagando mucho más por el mismo producto, como es por ejemplo el caso de coger un taxi en Auckland o en Tokio. Con la aplicación de esta nueva regulación, el viajero sigue pagando una tarifa más baja, la local, y por lo tanto, consigue un ahorro real. Los ahorros que consigue el consumidor sin embargo conllevan un coste de oportunidad para el operador móvil del país anfitrión, que de otro modo podría haber vendido su servicio de datos con sus tarifas locales  más altas. Se espera entonces que esto dará lugar a las renegociaciones de muchos acuerdos entre operadores móviles y los intermediarios de itinerancia, de tal manera que estos costes se puedan recuperar.

Los diferenciales entre las tarifas que surgen debido a factores orgánicos, tales como los costes inherentes a las estructuras y las economías de escala determinarán, por tanto, si otras regiones del mundo van a seguir los pasos de Europa en la eliminación de las tarifas de itinerancia. Es una propuesta tentadora para muchos reguladores, y probablemente en las agendas políticas y sociales se valorará muy positivamente, debido a la creciente dependencia de los datos móviles, al aumento de las incidencias de las facturas exorbitantes y a la consiguiente insatisfacción general sobre los operadores móviles.

Mientras tanto, los operadores de telefonía móvil en Europa tienen hasta el 30 de abril del próximo año antes de que los límites arancelarios provisionales se empiecen a notar, y se divida por cuatro  el pago de los suscriptores en itinerancia dentro de la UE. A partir de esa fecha, las llamadas de voz tendrán un tope de 5 céntimos de euro por minuto (desde el tope de los actuales 19 céntimos de euro), mientras que los mensajes de texto tendrán un coste adicional de sólo 2 céntimos de euro (frente al tope de los actuales 6 céntimos de euro) y los datos en 5 céntimos de euro por megabyte (actualmente su precio es de 20 céntimos de euro), según un comunicado de la Unión Europea. Estos cargos quedarán abolidos totalmente en junio de 2017.

Artículo original  - 'End of Roaming Charges - A Step Forward for Everyone, But What About the Operators?' by Tara Neal, Executive Editor, The Fast Mode

Traducido por, Francisco Martínez - LinkedIn

Author

Executive Editor and Telecoms Strategist at The Fast Mode | 5G | IoT/M2M | Telecom Strategy | Mobile Service Innovations 

Tara Neal heads the strategy & editorial unit at The Fast Mode, focusing on latest technologies such as gigabit broadband, 5G, cloud-native networking, edge computing, virtualization, software-defined networking and network automation as well as broader telco segments such as IoT/M2M, CX, OTT services and network security. Tara holds a First Class Honours in BSc Accounting and Finance from The London School of Economics, UK and is a CFA charterholder from the CFA Institute, United States. Tara has over 22 years of experience in technology and business strategy, and has earlier served as project director for technology and economic development projects in various management consulting firms.

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